
Proyecto de gasoducto está frenado a causa del problema del espionaje
“Lo que está retrasando ahora un poco la firma con Brasilia es este inconveniente que sabemos que tenemos”, reconoció el viceministro de Minas y Energía, Mauricio Bejarano, en alusión direc...
“Lo que está retrasando ahora un poco la firma con Brasilia es este inconveniente que sabemos que tenemos”, reconoció el viceministro de Minas y Energía, Mauricio Bejarano, en alusión directa a la situación acarreada por el espionaje que el gobierno brasileño anterior realizó a autoridades de nuestro país, y que frenó no solo la negociación del Anexo C de Itaipú sino también lo relacionado al gasoducto.
No obstante, aseguró que ve “con muy buenos ojos” el interés manifiesto de Brasil en concretar la obra. Recordó que en Brasilia, en una convocatoria oficial, “llevaron a todas las máximas autoridades energéticas de la región para decir: esto es lo que nosotros necesitamos”.
En contraste, con Argentina el avance fue significativo: hace más de un mes se firmó un memorándum de entendimiento para conformar un grupo de trabajo y definir aspectos de factibilidad, modelos de negocio y armonización normativa. “Ese memorándum significó un hito, aparte del que está firmado con Mato Grosso Sur, que también necesita imperiosamente este energético”, explicó el viceministro refiriéndose al gas.
Apuntan a que el Gasoducto Bioceánico esté operativo para el 2030
El trazadoEl trazado propuesto por Paraguay ofrece ventajas logísticas y ambientales: sigue la ruta bioceánica, evita zonas montañosas y comunidades, y aprovecha franjas de dominio ya disponibles. Esto permitiría una construcción rápida una vez adjudicada. “No existe ningún tipo de dificultad. Viene el camión, deja el ducto en tierra. No hay ni piedras siquiera en nuestro Chaco, y es llano”, subrayó Bejarano.
La obra no solo busca cobrar un canon por el paso del ducto, sino también abastecer el mercado interno mediante un ciclo combinado para generar energía eléctrica y comercializar excedentes en la región.
La caída de la producción de gas boliviano —que, según proyecciones, en 2030 no podrá cubrir su propio consumo— abre una oportunidad estratégica para Paraguay. “Tenemos una posibilidad enorme de suplir ese energético, que es el 50% de la matriz energética de Bolivia, y convertirnos en un gran comercializador regional”, afirmó.
Argentina y Paraguay avanzan en un acuerdo sobre el gasoducto bioceánico
Brasil, por su parte, proyecta aumentar su consumo de gas natural de 70 a 150 millones de metros cúbicos diarios en la próxima década, con un precio objetivo de 10 dólares por millón de metros cúbicos. El desafío es asegurar un comprador ancla que absorba al menos 10 millones de metros cúbicos diarios. “Todos los grandes players (jugadores) nos dicen: ‘yo estoy para la inversión, ustedes consigan el gran taker (comprador)’”, detalló Bejarano.
Potenciar industrias de alto consumoEl gasoducto también potenciaría industrias de alto consumo térmico como cementeras, plantas de fertilizantes y procesamiento de hierro del Mutún, así como la interconexión con regasificadoras en Chile y Brasil. Según el viceministro, la obra contempla 110 km en Argentina, 530 km en Paraguay y 410 km en Brasil, hasta el Gasbol que llega a San Pablo. Bejarano confía en que el ducto, junto con una planta solar fotovoltaica en el Chaco de hasta 140 MW y proyectos de generación distribuida, se conviertan en realidades de este gobierno.