Luciano Ledesma, enfermero del servicio de urgencia del Centro de Salud, relató que entre las carencias hay una constante falta de medicamentos básicos y que el personal de blanco, en la mayoría de los casos, se ve obligado a salvar las situaciones complejas con lo poco que tienen.

Señaló que hace poco recibieron insumos y algunas medicinas llegaron vencidas, algo terrible e inaceptable que no saben por qué no se investiga.

Dijo que actualmente no hay catéter, volutrol ni ceftriaxona. Estos elementos son esenciales para los pacientes que tienen enfermedades del corazón.

El funcionario explicó que las quejas de los usuarios no solo son por la escasez de remedios, sino también por la precariedad con la que se maneja el sistema de salud en este local, principalmente a raíz de la escasez de recurso humano capacitado para brindar un servicio seguro a la gente que acude al lugar en busca de atención médica.

Por su parte, Teresa Caballero, una de las pobladoras de Emboscada, manifestó su preocupación por el mal servicio de salud en la localidad y mencionó que es un problema que se viene arrastrando desde hace varios años. Pidió que las autoridades competentes accionen para que las cosas mejoren.

Resaltó que con solo mirar desde afuera el Centro de Salud se puede observar el lamentable estado en el que se encuentra, porque se tiene paredes rotas, techos con termitas y pilastras a punto de caerse.

También cuestionó que solo se tiene una ambulancia y que cuando la gente la necesita no está disponible.

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Luciano Ledesma, funcionario del local sanitario, hizo énfasis en que las necesidades que se sufre en el local sanitario son inmensas y que ya están cansados de pedir ayuda porque no son escuchados.

Indicó que incluso en reiteradas ocasiones los funcionarios han tratado de hablar con el director del Centro de Salud, doctor Fernando Román, pero el mismo hace caso omiso.

“Lo peor es que cuando hacemos la denuncia, luego tenemos que aguantar las represalias de nuestros jefes y por eso muchos no se animan a hablar. Estamos entre la espada y la pared”, lamentó el funcionario.

Para consultar sobre los inconvenientes tratamos de hablar con el doctor Fernando Román. Lo llamamos a su número con terminación 515 y no recibimos retorno.

Estamos abiertos a escucharlo si desea referirse al caso.

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