
Chovoreca: jueces y fiscales en la mira del JEM tras inminente impunidad en caso de incendios forestales en el Chaco
Durante la última sesión del pasado 2 de octubre, el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados emitió una resolución mediante la cual tomó conocimiento, a través de informaciones periodísticas...
Durante la última sesión del pasado 2 de octubre, el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados emitió una resolución mediante la cual tomó conocimiento, a través de informaciones periodísticas denunciadas por el obispo del Chaco, monseñor Gabriel Escobar, sobre una posible impunidad en los casos de incendios forestales en la zona de Chovoreca ocurridos en 2024, que significaron la destrucción de más de 200 mil hectáreas de bosques y campos ganaderos.
La resolución del JEM sostiene que, una vez cumplido el plazo legal de este proceso investigativo, el pleno de los integrantes de este órgano podrá expedirse sobre el análisis de la viabilidad del inicio de oficio de una investigación preliminar o de un enjuiciamiento, conforme a lo establecido en el artículo 18 de la Ley Nº 6814/2021. El plazo de referencia se cumple el 30 de octubre de 2025.
Camino a la impunidadActualmente, esta causa penal se encuentra camino a la impunidad a través del sobreseimiento definitivo del único imputado por los incendios forestales ocurridos en 2024, en la zona de la reserva del Parque Nacional Chovoreca, en el Alto Paraguay, donde se destruyeron más de 200 mil hectáreas.
El Ministerio Público, a cargo del agente fiscal Nelson Colmán, procedió a imputar al ganadero Hugo Miguel Zelada por ser el responsable de estos incendios, atendiendo a que se habría corroborado que el fuego se inició en la propiedad perteneciente al productor.
Lea más: Obispo critica a la justicia por no castigar a responsables de los incendios forestales en Chovoreca
De forma rápida y sin profundizar la investigación, el juez de Primera Instancia de Bahía Negra, Manuel Lezcano, solicitó el sobreseimiento definitivo del único imputado por esta causa. Esta resolución fue apelada por el fiscal Gabriel Rolón, quien tomó el caso tras el traslado de su colega. El Ministerio Público pedía que se le otorgara al encausado un sobreseimiento provisional, mientras continuaba la investigación.
El caso recayó en el Tribunal de Apelaciones del Alto Paraguay, a cargo de los magistrados Mirian Giménez, Elvio Ovelar y María Gloria Torres, quienes ratificaron el pedido de sobreseimiento definitivo, alegando una deficiente investigación por parte del Ministerio Público y que casi no se hizo nada en todo este tiempo.
Ante esta situación, el fiscal Rolón volvió a presentar una apelación ante la Corte Suprema de Justicia, solicitando un recurso de casación. En esta última y definitiva instancia finalmente se resolverá si el caso queda impune o si prosigue la investigación.
EcocidioMonseñor Gabriel Escobar es uno de los fuertes cuestionadores de esta posible impunidad, frente a un tremendo atentado contra la naturaleza, al cual denominó un verdadero ecocidio producido por el hombre. En varias ocasiones lanzó duras críticas contra el actuar poco creíble de los representantes de la justicia.
“¿Dónde está el apuro de estos jueces en solicitar el sobreseimiento definitivo del único procesado, sin que se tenga más tiempo para investigar lo que sucedió, y donde se destruyeron más de 200 mil hectáreas de puro bosque?”, expresó en relación con lo solicitado por la Fiscalía, que alegaba las malas condiciones de los caminos para llegar a los lugares donde se produjeron estos incendios.
Lea también: Devastador incendio en Chovoreca podría quedar impune
“Detrás de esta lamentable actuación, de seguro habrá algunas dádivas que pudieron haber recibido estos jueces. No puede ser que no sea castigada esta persona, teniendo las pruebas sobre estos incendios”, decía el obispo Escobar.
Incendios forestalesDesde 2019 se venían produciendo anualmente grandes incendios en la región Occidental, debido al largo período de sequía que afectó a todo el Chaco. En 2024, el fuego se encargó de destruir más de 200 mil hectáreas de campos ganaderos y reservas naturales, entre ellas la de Chovoreca, en el norte del Alto Paraguay.
Numerosos combatientes, compuestos por bomberos voluntarios, personal de la Secretaría de Emergencia Nacional, militares y trabajadores de estancias, lucharon durante varias semanas contra la voracidad del fuego, arriesgando sus propias vidas para evitar la propagación de las llamas.