
Tras la tormenta perfecta, el desafío es volver a la normalidad económica
Muchos de los puntos negativos que afectaron a la economía nacional durante la gestión de Mario Abdo Benítez (2018-2023), se atribuye principalmente a los impactos de la pandemia y pos pandemia,...
Muchos de los puntos negativos que afectaron a la economía nacional durante la gestión de Mario Abdo Benítez (2018-2023), se atribuye principalmente a los impactos de la pandemia y pos pandemia, como en la mayoría de los países del mundo. Durante el primer año de gestión de Mario Abdo (2019), nuestra economía enfrentó una fuerte desaceleración, que se vio afectada negativamente tanto por factores climáticos como por la coyuntura poco favorable de sus principales socios comerciales.
En los años siguientes (2020-2021), la pandemia obligó a declarar una emergencia sanitaria declarándose una cuarentena, lo que ocasionó el cierre de cientos de empresas, la pérdida de empleos formales, a más de un endeudamiento extra del Gobierno para cubrir las necesidades de la emergencia. En el 2020, el PIB cayó 0,8%, y repuntó en 4% en el 2021, por el efecto rebote.
Expansión del PIB no se refleja en una mejora de los ingresos laborales
Luego la economía lentamente fue agarrando ritmo con el levantamiento de las restricciones, pero luego vinieron otros choques como la suba de precios de la materias primas relacionadas siempre con el impacto pandemia, lo que fue desencadenó en una suba en cadena de los precios de la canasta. Desde la pandemia a la fecha, el índice de precios ha sufrido un aumento del 20% y si solo observamos el grupo de alimentos, la variación es superior al 30%.
El año 2022 considerado de la reactivación, lastimosamente fue truncado nuevamente por eventos climáticos que afectaron la producción agrícola y llevaron a un nulo crecimiento del PIB en ese año y una inflación del 8,1% en el cierre de ese periodo. Finalmente, para este periodo se espera un repunte del PIB en 4,5%, por encima del promedio regional y una inflación ya dentro de la meta del 4%.
Ahora el desafío es consolidar estos indicadores de la economía para que lentamente se vuelva a la normalidad. El BCP se encuentra en la encrucijada de empezar a bajar la tasa de política monetaria que se encuentra en 8,5% desde agosto del año pasado, esto limita el acceso al crédito a muchos sectores que aún no logran recuperarse de todo tras el impacto de la pandemia.
Avanzar en los indicadores que se tuvo retroceso como la lucha contra la pobreza total y extrema, la informalidad, el contrabando, de tal manera que se ese crecimiento que tanto se habla llegue a todos los niveles de la sociedad.
¿Cómo afectó la pandemia a las piezas del engranaje económico y social del país?
DESAFÍOSEntre los principales desafíos para la economía nacional es que se recuperen los niveles de estabilidad de precios de la canasta básica y que se mantenga la estabilidad de la moneda. Es necesario un crecimiento económico sostenible y más inclusivo, de tal manera que ese crecimiento baje a todos los niveles de la sociedad.
Además otro gran desafío radica en la reducción de la pobreza y del desempleo que se refleje no solo en un mejoramiento de los ingresos de la población, sino también en la calidad de los servicios. Reformas en el BCP: De aprobarse los proyectos que crean la superintendencia de pensiones y de valores, el BCP incorporará dos nuevos entes de control bajo su eje que pondrán a prueba la capacidad de gestión del regulador.
LO POSITIVOEconomía resiliente: Tras el bajón de las actividades en la pandemia, el impacto de la sequía y otros eventos, la economía paraguaya se destaca creciendo por encima de la región. Este año el PIB crecerá alrededor del 4,5%, tras el nulo crecimiento del 2022Evolución del Sipap: La evolución del Sistema de Pagos del Paraguay (Sipap) con su versión instantánea (SPI) y las nuevas funcionalidades ayudar a dinamizar el sistema financiero y la bancarización. El Sipap ya moviliza US$ 80.000 millones al añoSistema solvente: Los ratios de solvencia y liquidez del sistema financiero se mantienen dentro de los parámetros establecidos, Incluso en tiempos de pandemia, la morosidad estuvo por debajo del 3%. Superaron holgadamente las recientes pruebas de tensión.Superamos el examen de Gafilat: Tras una extensa evaluación a nuestro país sobre control antilavado Gafilat, se aprobó el examen pero con varios pendientes sobre la efectividad en la aplicación por lo que entró en una vigilancia intensivaLO NEGATIVOAumentó pobreza: La tasa de pobreza al 2022 fue del 24,7% superior al 24,2% cuando asumió Mario Abdo Benítez en 2018 y afecta a 1,9 millones de personas, La pobreza extrema subió de 4,8% (2018) a 5,6% (2022), claramente se nota un retroceso en la lucha contra la pobreza.Repunte de la inflación: Si bien la inflación actualmente se encuentra nuevamente en el rango meta del BCP (4%) hay periodos que la variación fue del 8% y 11%, por efecto de la pospandemia El IPC registró una variación acumulada del 30% entre el 2018 y 2022Mayor informalidad: La economía informal conocida como subterránea representa en término de valores el 45% del Producto Interno Bruto (PIB) movilizando unos US$ 22.019 millones. La actividad informal se ha visibilizado aún más después de la pandemiaVulnerabilidad de cooperativas: Se ha evidenciado la vulnerabilidad en el control del sistema cooperativo, donde ha permeado estructuras delictivas como el sonado caso de la Cooperativa San Cristóbal y otras. Urge un fortalecimiento de su ente regulador (Incoop).“El Banco Central del Paraguay (BCP) debe empezar la normalización de su política monetaria. La tasa referencial se encuentra en niveles aún elevados en 8,50%. Agentes económicos reclaman que ya es tiempo que se empiece a bajar la tasa”
“Economía va mostrando signos de recuperación, pero aún ciertos riesgos en este proceso de volver a la normalidad. “No se debe descuidar las tareas en lo que respecta a la macroeconomía”, Carlos Carvallo
Pese a la fortaleza que mostró nuestra economía para enfrentar las crisis de este periodo, todavía enfrenta otros retos que le impiden avanzar al siguiente nivel y alcanzar el grado de inversión, para lo cual requiere de reformas profundas