Luqueño dominador, pero...

Un duelo con mucha intensidad. Con dos equipos que intentaban llegar a la portería rival con la menor cantidad de toques posibles.

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En los primeros minutos fue Olimpia el que arrancó mejor. El franjeado encontró buenas conexiones, especialmente por el lado izquierdo y generó aproximaciones interesantes sobre el área adversaria.

Una vez que pudo plantarse mejor en el medio sector, Luqueño logró equiparar el juego y luego empezó a marcar diferencia en el trámite. Los auriazules ejercieron una presión alta que no permitía a su rival salir con comodidad. Eso hacía que recuperaran rápidamente el balón y pasen de inmediato a fase ofensiva.

Combinando buen juego colectivo con salidas rápidas, los dirigidos por Julio César Cáceres acorralaron en su terreno al Franjeado por grandes pases y generaron varias ocasiones para abrir el marcador. Una mano salvadora de Olveira o un cruce preciso de un defensor sostuvieron la paridad durante el primer lapso de juego.

En la segunda parte Luqueño continuó con la misma intensidad, pero de a poco Olimpia, que ajustó algunos detalles con respecto a la marca en la zona medular, fue controlando la intensidad de su rival y empezó a encontrar espacios para ir al ataque.

Esa intensidad impuesta en la primera etapa comenzó a pasar factura en lo físico al Auriazul. Empezó a ceder terreno, espacios y el Franjeado inquietó a la última zona.

Con los cambios, ambos entrenadores intentaron darle frescura a sus equipos. En ese aspecto, la visita fue la que recuperó dinámica y claridad en su juego, pero no marcaba.

Por su parte, el Decano perdió todas las conexiones para elaborar juego. Era un manejo de intentos generalmente individuales y sin claridad, hasta que en la última pelota del partido se generó la mejor conexión y Bruera no la desperdició.

“Tenemos que tener una actitud diferente desde el primer minuto hasta el último. Hoy puedo decir que jugamos bien, pero el resultado es adverso. Se puede estar conforme con lo que se intentó hacer en el juego, pero el resultado no ayuda”, fueron las primeras palabras de Julio César Cáceres, entrenador de Luqueño, tras la derrota 1-0 ante Olimpia.

Sobre la jugada que terminó en el gol, el orientador indicó: “No podemos quedarnos a reclamar, tenemos que saber comer patadas y la jugada de Diego Fernández también tenía que terminar en gol. Este tipo de resultados después del desgaste que hicimos duele”, indicó.

“Ganar los partidos. Eso es lo que nos está faltando para poder asentarnos como candidatos. No es suficiente manejar el partido, hay que ganar porque así se conforman los grandes equipos”, concluyó el “Emperador”.