La Cámara de Diputados contrató la provisión de seguro médico privado por unos G. 15.289 millones para los años 2024 y 2025. “Es una estafa al ciudadano pero también al funcionario”, planteó el diputado Raúl Benítez.

El parlamentario indicó que es una contradicción que el sector privado aporte al sistema público pero desde el sector público las instituciones aporten al privado. “Evidentemente el único que sale ganando es el dueño del negocio, el ciudadano no gana y el funcionario tampoco gana, lo único que va a tener este es su consultita a los 15 minutos pero cuando en pase algo que en realidad implique un gasto mayor, no hay seguro privado que te aguante”, planteó.

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Mencionó lo que ocurrió en la pandemia, cuando los afectados por el COVID-19 terminaban rogando por lugares en hospitales públicos porque ya no podían costear camas de terapia en los sanatorios.

El diputado Benítez señaló en ese contexto que lo que se necesita es que el sector público también aporte al sistema de salud pública, para así fortalecerlo. “Necesitamos que los hospitales funcionen, que tengan los insumos, que la gente pueda acudir y tenga una atención mínima dentro del hospital”, declaró para ABC TV.

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Finalmente, dijo que lo que se necesita es que se suspendan este tipo de contratos y se use todo ese dinero para fortalecer el sistema de salud pública. “Esto nunca tuvo que haber nacido, se tiene que suspender, nunca tuvo que haberse planteado. Lo sufrimos en pandemia pero no aprendimos”, lamentó sobre lo decidido por la Cámara de Diputados al finalizar el año pasado.