El supuesto distribuidor de drogas y homicida Jorge José Olmedo Olivetti, de 26 años, alias Topo, oriundo de Loma Pytã, Asunción, fue arrestado el 19 de junio pasado en Limpio por policías del departamento Antisecuestro, en una operación supervisada por el fiscal de la unidad 2 de Antisecuestro, Lorenzo Lezcano.

Fue en carácter de sospechoso de la desaparición del brasileño Antonio Augusto Streski Manginski, de 25 años, reportada el 4 de octubre del año pasado en Loma Pytã, donde el extranjero cursaba la carrera de Medicina en la Universidad María Auxiliadora (Umax).

Aunque los policías de Antisecuestro y el fiscal Lezcano no hallaron evidencias en su contra en el caso de la desaparición del brasileño, Topo igual quedó preso, pero por la orden de detención e incluso imputación por homicidio doloso que había presentado el 1 de febrero de 2023 el fiscal Aldo Cantero, en ese entonces de la unidad 1 de la Barrial 5 de Asunción.

Se trata del crimen del futbolista Héctor Nehemías Romero Arce, paraguayo, de 23 años, perpetrado el 29 de enero de 2022.

La víctima fue ejecutada con un tiro en la sien, aparentemente por el propio Topo, porque supuestamente debía dinero por las drogas que consumía. De hecho, el asesinato ocurrió en la casa de la madre de Topo, en Loma Pytã.

Además, los intervinientes que detuvieron a Topo aquel 19 de junio informaron que hallaron abundante droga en su casa de Limpio, por lo que se dio participación al fiscal Marco Amarilla, de Narcotráfico.

Sin embargo, sorpresivamente Topo fue liberado el 22 de junio pasado, tres días después de su captura, por orden de la jueza penal de garantías 3 de la capital, Cynthia Lovera.

La magistrada argumentó que no estaba firme la imputación por homicidio, que fue apelada por la abogada Cynthia Lorena Giménez y enviada a un Tribunal de Apelación, el 16 de febrero pasado.

Recién ese día en que Topo fue liberado, el 22 de junio, la imputación por homicidio fue confirmada por el Tribunal de Apelación en lo Penal, Tercera Sala, integrado por los camaristas Agustín Lovera Cañete, José Waldir Servín Bernal y Cristóbal Ramón Sánchez Díaz,.

Aunque esta “descoordinación” facilitó la libertad de Topo en el caso del homicidio, el supuesto narcoasesino debía haber sido imputado por la droga encontrada en su casa.

Pero el fiscal de esa causa, Marco Amarilla, de Narcotráfico, extrañamente no solamente olvidó ordenar la detención de Topo, para asegurar su sometimiento, sino que ni siquiera lo imputó, supuestamente porque sabía que iba a estar luego preso por el caso del homicidio.

El fiscal Marco Amarilla pensaba tomarle audiencia indagatoria recién mañana, viernes, pero Topo ya está de nuevo en las calles.

Como para corregir esta vergonzosa actuación, el fiscal adjunto de Narcotráfico, Marco Alcaraz, exigió al fiscal Marco Amarilla que ordenara la detención de Topo, pero ya se hizo tarde.

Así también, se emitió recién ahora una nueva orden de detención por el homicidio, causa que quedó con la fiscala Esmilda Álvarez, por el traslado de Aldo Cantero.