
Peña decía que transparencia no tenía vuelta atrás y ahora debe demostrar coherencia
En abril de 2016, el entonces ministro de Hacienda del gobierno de Horacio Cartes y actual presidente de la República, Santiago Peña, puso la transparencia y el acceso a información pública com...
En abril de 2016, el entonces ministro de Hacienda del gobierno de Horacio Cartes y actual presidente de la República, Santiago Peña, puso la transparencia y el acceso a información pública como eje central de su discurso en la conferencia internacional “Cuentas Claras. Gobernabilidad para el crecimiento con equidad en América Latina y el Caribe”, organizada por el Banco Mundial (BM) y desarrollada en Montevideo. Muy pronto ese discurso rendirá examen de coherencia.
Muerte de la transparencia: alertan que ley de datos personales hasta podría ocultar DD.JJ.
Como presidente de la República, Peña tendrá la posibilidad de salvar la transparencia pública que en aquella ocasión consideraba como un punto sin retorno, y que paradójicamente -en estos días- está amenazada por sus propios aliados del cartismo y sus satélites a través de la llamada ley de protección de datos personales, que tendría su último trámite legislativo esta semana en Senado.
Durante la citada conferencia ante economistas y políticos de diversas partes del Mundo, Peña alabó las leyes ahora en riesgo, destacando que fueron impulsadas por el entonces presidente Cartes, su hasta ahora padrino político.
“El presidente (Horacio Cartes) envía una ley de acceso a información pública y fue la punta del iceberg, al mes siguiente se empezaron a publicar todos los salarios de los funcionarios públicos (...) y esto ha traído como consecuencia un escrutinio público sin comparación”, afirmó Peña.
El mismo hizo alusión a las leyes Nº 5189/14 (sobre provisión de informaciones de uso de recursos públicos) y la Ley Nº 5282/14 (de libre acceso ciudadano a la información y transparencia gubernamental), que ahora están en riesgo con el artículo 24 del proyecto de ley de “protección de datos personales”.
“(La transparencia) ha generado una serie de reformas que nos permiten hoy tener una gestión pública mucho más eficiente y el concepto que nosotros entendemos está detrás de esto es que: ‘los seres humanos somos buenos por naturaleza, pero cuando nos controlan, nos portamos mucho mejor’”, insistió en ese entonces Peña.
Sin embargo, ese concepto aparentemente no es compartido por la mayoría cartista y de sus aliados en el Congreso, ya que pervirtieron una iniciativa loable, que es la de resguardar los datos de los ciudadanos y le agregaron un blindaje para los funcionarios públicos, que a partir de ahora podrán oponerse a que se provea información pública sobre su gestión.
El ahora mandatario, durante la conferencia incluso destacó como algunos buenos ejemplos del resultado de la transparencias el caso de las protestas estudiantiles en la Universidad Nacional de Asunción (“UNA no te calles”) o la salida del excontralor general de la República, Óscar Rubén Velázquez (Unace), casos que saltaron a la luz gracias a la transparencia de datos públicos.
La transparencia pública “está generando una revolución, pero estamos viendo resultados que son muy alentadores. Algunos de estos resultados principalmente representan un apoyo para la gestión del Ministerio de Finanzas, que siempre (está en) una situación muy ingrata, (tiene una) responsabilidad muy ingrata: tenemos que cobrar los impuestos y después tenemos que distribuirlos y nunca alcanza para todos, entonces la transparencia es un gran aliado para poder asignar esos recursos siempre limitados (sic)”, acotó.
En tal sentido, incluso insistió diciendo que veían ya entonces que “estas medidas de transparencia, de rendición de cuentas, medidas de acceso a información pública han sido las principales aliadas dentro de la Función Pública para poder responder de una manera mucho más eficiente”.
Pregonaba más transparencia y punto de no retornoContrario al enorme retroceso en materia de transparencia pública que se podría generar con la citada ley de “protección de datos personales”, Peña siendo ministro no solo consideraba imposible un retroceso, sino que incluso hablaba de dar más acceso y participación a la ciudadanía.
“La gran pregunta es: ¿cuál es el equilibrio óptimo? (..) Yo creo que tenemos que irnos hacia el extremo de más acceso (a información pública) y con el riesgo de que esto implica un desgaste político y social muy grande”, dijo, alegando que incluso gobiernos anteriores no se animaron a tomar estas medidas justamente porque “tenían un costo político muy importante”.
Si bien él no lo dijo, el costo político que refiere haría alusión a que el Partido Colorado, incluso ahora en la gestión de Peña, se maneja de manera prebendaria y mantiene a muchos de sus operadores políticos en base a cargos públicos.
En dicha conferencia, Peña culminó comprometiéndose él mismo, al decir: “Hoy estamos entendiendo que esto no tiene retorno. El acceso a la información pública, la rendición de cuentas, la participación ciudadana es un bien que no tiene retorno, entonces tenemos que ver cuáles son los instrumentos que vamos a dar a la ciudadanía para que puedan realmente ejercer ese control de manera efectiva”.
Peña podrá demostrarlo haciendo uso de su facultad del veto parcial, testando el cuestionado artículo 24.
Senado podría sancionar el miércolesHoy en mesa directiva del Senado se acordaría la inclusión en el orden del día de la sesión ordinaria del miércoles 22 del proyecto de ley de “protección de datos personales”, según adelantó el titular del Senado, Basilio “Bachi” Núñez (ANR, cartista).
El tratamiento también dependerá de que en comisiones se dictamine, pudiendo en esta instancia el Senado solamente aceptar la versión Diputados (la más cuestionada) o ratificarse en la suya, para lo cual requieren de mayoría absoluta (23 votos).
Independientemente a la versión, ambas afectan en mayor o menor medida a la transparencia.