Pese a contar ya con dictamen a favor, y habiendo cumplido incluso el paso no obligatorio de otorgar el derecho a la defensa, el presidente de la Cámara de Diputados, el cartista Raúl Latorre, no incluyó en el orden del día de mañana los casos de los liberales Cleto Marcelino Giménez y Roya Torres ni los otros dos pendientes.

Además de Torres y Giménez, que están imputados por presunto cobro indebido de honorarios junto a sus nepobabies y supuestos planilleros en la Cámara Baja, también tienen pedidos pendientes de desafuero el diputado cartista Estaban Samaniego y su colega colorado disidente, Mauricio Espínola.

El caso de Samaniego es el más alevoso, puesto que acumula desde el anterior periodo legislativo tres pedidos de desafuero por presunta agresión física (incluso a mujeres) y uno por presunta “tragada” de fondos cuando era intendente de Quyquyhó.

Pedidos de desafuero a la par, plantea Latorre

Por su parte, el de Espínola es más complejo, siendo el único caso donde cuenta con dictamen en mayoría por el rechazo, esto debido a los indicios de manipulación política en torno a su imputación.

El mismo es uno de los procesados por presunta revelación de secretos privados por funcionarios o personas con obligación especial y otros delitos junto al expresidente Mario Abdo Benítez, mediante una denuncia del expresidente Horacio Cartes.

En esta causa se filtraron presuntas conversaciones entre el abogado de HC, Pedro Ovelar, y el fiscal Aldo Cantero, donde este último presuntamente seguía órdenes sobre cómo operar.