
Paraguay se mantiene en mitad de tabla en Índice de Libertad Económica
Cada una de estas áreas se construye a partir de componentes, subcomponentes y variables específicas. En total, el índice incorpora 45 indicadores distintos, cuya calificación se expresa en una...
Cada una de estas áreas se construye a partir de componentes, subcomponentes y variables específicas. En total, el índice incorpora 45 indicadores distintos, cuya calificación se expresa en una escala de 0 a 10. Este sistema permite captar desde la fortaleza institucional y el respeto a la propiedad privada hasta el nivel de apertura comercial y estabilidad monetaria. El promedio de las cinco áreas otorga la puntuación final de cada país, lo que convierte al índice en una herramienta de referencia internacional para evaluar el entorno económico y la calidad de sus instituciones.
De acuerdo con el último informe, Hong Kong y Singapur figuran en las dos primeras posiciones del ranking global de libertad económica. Estos países se destacan por su apertura comercial, estabilidad institucional y políticas que facilitan la inversión y la innovación. En el tercer lugar se ubicó Nueva Zelanda, seguida de Suiza y Estados Unidos, que completan el grupo de las cinco economías mejor posicionadas.
En contraste, economías desarrolladas como España (puesto 22), Italia (47) y Noruega (48) aparecen rezagadas, reflejando las diferencias en políticas públicas y marcos regulatorios.
En cuanto a la radiografía del clima económico en América Latina, Paraguay se ubica en la 60ª posición a nivel mundial. Esta ubicación lo coloca en la mitad superior del ranking regional, superando a gigantes como Brasil (87º), Argentina (159º) y Venezuela (165º), pero rezagado frente a países con mayores niveles de apertura y estabilidad institucional como Costa Rica (14º), Chile (26º), Panamá (27º) y Perú (51º).
El contraste con sus socios del Mercosur resulta llamativo: mientras Paraguay figura en una posición moderada, Brasil arrastra problemas estructurales que lo ubican más abajo, y Argentina junto con Venezuela se encuentran entre los últimos del mundo, de acuerdo con el índice. Esto ofrece al país la oportunidad de diferenciarse como una alternativa más confiable en la región, siempre que avance en reformas que fortalezcan la independencia judicial, reduzcan trabas burocráticas y garanticen reglas claras de largo plazo para el sector privado.
La institución también destaca que las naciones con mayores niveles de libertad económica exhiben condiciones de vida muy superiores a las de aquellas con más restricciones. El estudio compara al 25% de países más libres con el 25% menos libre evidenciando brechas significativas en múltiples dimensiones sociales y económicas.
Los ingresos promedio en las economías más libres resultan 6,2 veces superiores, mientras que el 10% más pobre percibe 7,8 veces más ingresos que en los países con menor apertura económica. A su vez, la población trabaja en promedio siete horas menos por semana, lo que refleja una mejor calidad en el balance entre vida laboral y personal.
En materia social, la esperanza de vida se extiende alrededor de 17 años más y la mortalidad infantil es mucho menor. A esto se suman mayores niveles de satisfacción personal reportados por los ciudadanos, gobiernos percibidos como menos corruptos y entornos más limpios y sostenibles.
Para Fraser, un marco institucional abierto no solo impulsa el crecimiento económico, sino que también se traduce en un mayor bienestar y en mejores indicadores de desarrollo humano.
* Este material fue elaborado por MF Economía e Inversiones