Más de 30 mesiteros utilizan actualmente el mercado como fuente de trabajo, aunque algunos ya han optado por retirarse debido a la baja en las ventas y las malas condiciones del lugar. Quienes permanecen insisten en que se necesita una intervención urgente para mantener este espacio no solo como un punto de comercialización, sino como parte del patrimonio y la identidad de la comunidad carapegüeña.

El mercado municipal se encuentra próximo a cumplir 85 años de su inauguración, que tuvo lugar el 11 de octubre de 1940, lo que refuerza el pedido de que sea atendido no solo por su valor funcional, sino también por su importancia histórica y cultural para la ciudad.

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Una de las comerciantes afectadas, Isabela Giménez, expresó que es urgente solucionar los problemas del tinglado, principalmente las goteras y canaletas rotas, así como mejorar la iluminación general del sitio. Asegura que estos problemas ya fueron comunicados al intendente Luciano Cañete (ANR), y solicita que se consideren en los proyectos de inversión municipal.

Piden mejoras en mercado

Por su parte, el inspector general de la Municipalidad, Pablo Chamorro, reconoció la existencia de reclamos históricos en torno al mercado. Afirmó que están al tanto de la necesidad de reparar alrededor de 25 metros de canaletas y que está previsto atender ese pedido. En cuanto a la iluminación, explicó que los focos se reponen con frecuencia, pero desaparecen rápidamente, aunque no se ha determinado si se trata de robos o daños, lo que complica una solución sostenida.

Los mesiteros reiteran su pedido de atención a las autoridades, considerando que el mercado municipal representa mucho más que un simple espacio de ventas: es un símbolo de la vida económica, social e histórica de Carapeguá que no debe ser olvidado.