Oficialmente, Alemania aún no comunicó a Paraguay la incautación del colosal cargamento de cocaína que salió el 15 de mayo pasado del Puerto Fénix de Mariano Roque Alonso en un contenedor enviado por la empresa de maletín Nopal SA.

De hecho, de momento es muy difícil que la justicia alemana envíe datos oficiales, debido a que se declararon en reserva de actuaciones, es decir, pueden manejar el caso en secreto hasta tanto lleguen a una etapa conclusiva de su investigación.

Sin embargo, el fiscal de Narcotráfico de nuestro país, Deny Yoon Pak, ya abrió una investigación con base principalmente en la información publicada por los medios de prensa alemanes.

El fiscal incluso ya hizo un pedido de informe a la Dirección Nacional de Aduanas (DNA), pero esta institución aún no contestó.

Su director, Julio Fernández, había escrito el viernes último en su cuenta de Twitter que “la tecnología no ha fallado, pero la falla o complicidad podría ser del factor humano”.

Fue en referencia a un funcionario que tendría 22 años de edad y que fue el que operó el escáner por el que pasó el contenedor contaminado.

El propio Julio Fernández reconoció que el citado funcionario tuvo que haber reportado la contaminación que sí fue detectada por la máquina.

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De momento, no hay un solo pedido de detención en Paraguay, aunque claramente pudo haber complicidad de Aduanas para dejar salir el contenedor.

En la nómina de indagados figuran justamente el funcionario que escaneó el contenedor y sus superiores directos.

También la despachante Gloria Beatriz Morínigo Mendoza, quien firmó por el envío, y los supuestos dueños de la empresa de maletín utilizada para la exportación.

Cabe recordar que la firma Nopal SA fue adquirida el 7 de febrero pasado a nombre de dos muertos.