De acuerdo a la investigación de la fiscala Carolina Rosa Gadea, la agresión sexual habría ocurrido a inicios de abril en un inmueble ubicado en la periferia de Ciudad del Este cuando el denunciado se quedó solo en la casa con la víctima.

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La adolescente confesó que su padrastro le hizo sentar en la cama para manifestarle sus intenciones de tener relaciones sexuales con ella, pero ella se resistió rotundamente. Sin embargo, le dijo que la haría suya a la buena o a la mala y seguidamente la sometió a la fuerza.

A pesar de sus esfuerzos por escapar, la niña habría sido alcanzada y llevada a la habitación, donde el hombre la desvistió utilizando la fuerza física y se subió sobre ella para violarla. Ante el grito desesperado, el padrastro se levantó y huyó a bordo de su motocicleta, según el relato.

La adolescente contó que le contó lo sucedido a su madre quien supuestamente minimizó en todo momento para no denunciar a su concubino, situación que molestó a la joven, que decidió salir de su casa y refugiarse en la vivienda de su madrina, con quien se presentaron en la Fiscalía para hacer su denuncia.

Posteriormente, la chica fue entrevistada por una psicóloga del Centro de Atención a Víctimas del Ministerio Público y relató detalladamente la coacción sexual sufrida, informe que permitió a la fiscala Carolina Gadea imputar al autor y la madre de la víctima.

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El presunto violador tiene pedido de prisión preventiva, mientras que para la madre la fiscal solicitó la aplicación de medidas alternativas a la prisión.