La población de San Carlos se ubica a unos 100 kilómetros del casco urbano de la capital departamental, hacia el interior del Chaco. Al igual que otras comunidades rurales del distrito, sus habitantes se encuentran aislados desde hace más de dos meses por la falta de caminos.

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Es más, estas localidades, hasta el momento, son reabastecidas con alimentos a bordo de helicóptero, tal como ocurrió hace una semana, cuando precisamente la Secretaría de Emergencia Nacional les asistía con kits de víveres, luego del pedido de auxilio que hacían los pobladores.

En medio de tantas necesidades generadas por el aislamiento, caracterizado por una tremenda crisis económica debido a la falta de trabajo, doña Rosalía, comenzó a trabajar en su huerta familiar, pensando tal vez que su producción podría servir para ayudar a las familias en casos extremos.

Una verdadera lucha titánica es la que realizan las maquinarias contratadas por la Municipalidad de este distrito, a las que se sumaron otras maquinarias de la Gobernación y de algún ganadero. Lograron, en una semana, rehabilitar el camino de 30 kilómetros que une las localidades de San Carlos y Toro Pampa.

Atendiendo que la población de San Carlos no supera las 55 familias y que la producción hortícola era bastante para este pequeño mercado, la mujer productora aprovechó el momento de esta reapertura del camino para conseguir un vehículo y llevar sus productos hasta la localidad de Toro Pampa, una población mucho mayor que la suya.

En pocas horas, Rosalía pudo vender sus lechugas, perejil y cebollita de hoja, mencionando que solo llevó una escasa cantidad como prueba, ya que también cuenta con tomate, locote y zanahoria, y que ya tiene proyectado un segundo viaje al lugar para llevar más productos. La mujer realmente se sentía feliz por esta tarea.

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La idea era sacar mi producción hacia Fuerte Olimpo, pero esto aún está difícil debido a que todavía existen tramos del camino impasables. “Por de pronto, me conformo con esta vía de acceso y salida, y creo que en breve también se rehabilitará el camino para llegar a la localidad de María Auxiliadora, para poder comercializar mis productos allí”, enfatizó.

El aislamiento de 66 días que afecta a los distritos de Fuerte Olimpo y Bahía Negra genera una tremenda crisis económica debido a la falta de trabajo, pues la producción ganadera se paralizó durante todo este largo tiempo, y como se sabe, este rubro es el único que genera ingresos económicos en la zona.

Numerosas familias dependen de los trabajos en las estancias, ya sea como peones o como trabajadores para realizar limpiezas y alambrados. Las aguas de lluvia inundaron cientos de kilómetros de caminos y campos ganaderos, por lo que estos productores no pueden sacar sus animales para la venta.