Las imágenes fueron grabadas durante la siesta del miércoles y se observa a una mujer, identificada según sus vecinos como Rufina Ginter, agrediendo con cadenas a un perro atado en lo que aparenta ser su patio. En las crueles imágenes, el animal se contorsiona de dolor hasta que logra zafar.

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La denuncia fue hecha inmediatamente ante la Dirección de Bienestar Animal y ante el municipio local, desde donde dijeron que notificaron a la dueña, quien recibió la nota pero no dio declaraciones sobre su inhumano accionar. El hecho fue derivado además al juzgado de faltas y el animal está en proceso de rescate para ser recibido por una familia nueva.

Según la Dirección de Bienestar Animal, las sanciones a las que se exponen las personas por incurrir en el maltrato animal con la legislación vigente contempla la tipificación como delito y dispone como sanción la pena privativa de libertad de hasta dos años o multa, además de la prohibición de adquirir o poseer animales domésticos por un plazo de hasta diez años.

La Ley 4.840/2013, “De Protección y Bienestar Animal”, menciona también en su artículo 20 que las autoridades competentes pueden proceder al decomiso y rescate del animal, “si hay indicios de maltrato, tortura, síntomas de desnutrición o si se encuentran en instalaciones indebidas”.