Cómo comenzó y terminó con un penal el partido

Que comienzo y que final en Juan León Mallorquín ayer, donde en el estadio Ka’arendy Cerro Porteño consiguió en la agonía del partido un triunfo sobre General Caballero, que cuando tuvo un hombre de más en el campo de juego no fue capaz de aprovechar.

Una descalificadora falta de Da Costa, advertida desde la cabina, dejó al equipo azulgrana a solo ocho minutos de iniciarse el encuentro con uno menos. Esa situación traía la necesidad de replantear todo, pero el técnico Diego Martínez mantuvo el esquema de tres en el fondo y los dos carrileros, buscando la salida rápida y pelotas al frente a Domínguez, el único en ofensiva, por cierto muy inquieto y rápido.

En medio de ese trámite, Roa tuvo en sus pies la ventaja del local, pero la estirada de arquero Arias evitó el gol y no mucho después vino la respuesta del Ciclón, tras una larga pelota y corrida de Cecilio, este al llegar casi al área chica sacó un potente remate y el balón se estrelló por el palo. A la tarde/noche agradable en el Ka’arendy se asoció el trámite en la cancha en lo que fue la primera fracción, que se cerró con la expulsión del defensor Jorge Velázquez, y todo igualado.

Con variantes en ambos bandos se reinició el juego, y la complementaria fue más a favor del cuadro capitalino. La avidez de ganador se sintió por el lado de Cerro Porteño, sin embargo pasó otro susto con el remate de Maná, en el que la pelota volvió al campo devuelta por el travesaño. Los cambios hicieron más efecto a la idea de romper el cero de los azulgranas, Torres se perdió una chance; el golero Guillén le acalló el festejo, en otra mucho más clara, Pachi Carrizo no aprovechó.

Con el Ciclón decidido a descontar la diferencia con Libertad, pero con el anfitrión respondiendo, se encaminaban hacia el empate. Una pelota llovida y muy cerca a los tres palos del dueño de casa hubo una mano de Rodas y tras la revisión VAR, penal del que se encargó Torres y gol de la victoria en el décimo minuto de adición. Un final raro y con un montón de amonestados.

Que comienzo y que final en Juan León Mallorquín ayer, donde en el estadio Ka’arendy Cerro Porteño consiguió en la agonía del partido un triunfo sobre General Caballero, que cuando tuvo un hombre de más en el campo de juego no fue capaz de aprovechar.

Una descalificadora falta de Da Costa, advertida desde la cabina, dejó al equipo azulgrana a solo ocho minutos de iniciarse el encuentro con uno menos. Esa situación traía la necesidad de replantear todo, pero el técnico Diego Martínez mantuvo el esquema de tres en el fondo y los dos carrileros, buscando la salida rápida y pelotas al frente a Domínguez, el único en ofensiva, por cierto muy inquieto y rápido.

En medio de ese trámite, Roa tuvo en sus pies la ventaja del local, pero la estirada de arquero Arias evitó el gol y no mucho después vino la respuesta del Ciclón, tras una larga pelota y corrida de Cecilio, este al llegar casi al área chica sacó un potente remate y el balón se estrelló por el palo. A la tarde/noche agradable en el Ka’arendy se asoció el trámite en la cancha en lo que fue la primera fracción, que se cerró con la expulsión del defensor Jorge Velázquez, y todo igualado.

Con variantes en ambos bandos se reinició el juego, y la complementaria fue más a favor del cuadro capitalino. La avidez de ganador se sintió por el lado de Cerro Porteño, sin embargo pasó otro susto con el remate de Maná, en el que la pelota volvió al campo devuelta por el travesaño. Los cambios hicieron más efecto a la idea de romper el cero de los azulgranas, Torres se perdió una chance; el golero Guillén le acalló el festejo, en otra mucho más clara, Pachi Carrizo no aprovechó.

Con el Ciclón decidido a descontar la diferencia con Libertad, pero con el anfitrión respondiendo, se encaminaban hacia el empate. Una pelota llovida y muy cerca a los tres palos del dueño de casa hubo una mano de Rodas y tras la revisión VAR, penal del que se encargó Torres y gol de la victoria en el décimo minuto de adición. Un final raro y con un montón de amonestados.