El mobiliario de las escuelas del interior de Alto Paraná está en pésimo estado y, pese a los reiterados pedidos de los docentes a las autoridades, no reciben respuestas. En Itakyry, en al menos tres instituciones educativas, abundan los pupitres rotos.

Una de las más afectadas es la emblemática Escuela Nº 84 Cerro Corá, la primera casa de estudios del Alto Paraná. Allí asisten 335 alumnos que deben lidiar con sillas rotas, mesas averiadas y otras carencias.

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La situación es similar en la Escuela San José, del mismo distrito, donde acuden 220 estudiantes. Los pupitres no se renuevan desde hace años y los pocos muebles disponibles ya fueron reparados en múltiples ocasiones.

Asimismo, en la escuela Santa Librada, de Itakyry, es urgente la necesidad de mobiliario nuevo para sus 300 alumnos. Los pupitres de esta institución también son muy antiguos, y muchas veces padres, docentes y alumnos deben remendarlos para poder seguir utilizándolos.

En Alto Paraná, solo dos de los 22 municipios recibieron los pupitres chinos distribuidos por Itaipú. Docentes y directores lamentan que las instituciones educativas no sean prioridad para el Gobierno Nacional. Incluso, en algunas escuelas donde se entregaron los muebles, ya se reportaron averías tras solo tres meses de uso.

La compra de los muebles chinos, conocidos también como “pupitres de oro”, fue adjudicada a la empresa Kamamya SA por un monto total de 32 millones de dólares (G. 248.713 millones), por parte de Itaipú.

En total deben distribuirse 330.000 muebles, pero muchas instituciones aún no los recibieron. La adquisición fue criticada desde el inicio, tanto por su costo millonario como por haber dejado de lado a la industria nacional del mueble. La empresa proveedora es propiedad de Liong Jang, amigo del vicepresidente de la República, Pedro Alliana, y del director de la hidroeléctrica, Justo Zacarías Irún.