El ingeniero Rubén Sanabria, miembro de la Coordinadora Agrícola del Paraguay (CAP), informó que las áreas productivas como Santa Rita, Naranjal, Iruña y San Cristóbal (sur de Alto Paraná) se encuentran en condiciones óptimas gracias a las lluvias oportunas.

No obstante, mencionó que en localidades como Yguazú y en los municipios situados en el norte de Alto Paraná, donde los suelos son más arenosos y las precipitaciones fueron menos, se reportan retrasos en el desarrollo de las raíces. Esto podría afectar los rendimientos finales.

Lea también: Lluvias intensas se extienden a 13 departamentos y también a Asunción

En esta temporada del año, la soja es el principal cultivo en Alto Paraná, donde se sembraron más de 900.000 hectáreas. En la anterior campaña sojera en el departamento, los rendimientos alcanzaron entre 2.900 y 3.000 kilos por hectárea.

“En líneas generales, podemos decir que un 70% del departamento se está nivelando con estas lluvias. El 30% restante está en vías de recuperación, y en muchos casos incluso permitirá resembrar soja zafriña entre mediados y finales de enero”, explicó Sanabria.

A pesar del panorama climático, el sector enfrenta desafíos relacionados con el precio internacional de la soja que repercute en los ingresos del productor y la bajante de los ríos que complica la logística para la exportación.

Le puede interesar: Productor consigue medida de urgencia para cultivar soja en Gral. Eugenio A. Garay

“Nuestra prioridad es mantener buenos rendimientos y aplicar los cuidados necesarios contra plagas, enfermedades y condiciones adversas. Incluso estamos utilizando tecnologías como productos antiestrés para mitigar los efectos del clima”, señaló el ingeniero.

La perspectiva favorable también se encuentra en la producción de la agricultura familiar. Teodoro Galeano, agricultor de Minga Guazú, reportó buenos resultados en otros cultivos, como sandía, melón y frutas diversas, beneficiados por temperaturas medias y la ausencia de fenómenos severos como granizadas.