Se trata de Aldo Andrés González González, de 33 años, quien fue arrestado en su casa situada de la compañía Naranjaty de Capiatá en un allanamiento supervisado por la fiscala de San Lorenzo, María Genoveva Figueredo Insaurralde.

El procedimiento fue ejecutado por policías de Investigaciones del departamento Central.

El jefe de esta unidad policial, comisario principal Hugo Cristian Grance, dijo que González sería quien vendió el celular que pertenecía al contador Miguel Ángel Pereira Acosta, de 61 años.

Este último, quien también era actor, fue encontrado muerto en su casa del barrio Florida de San Lorenzo, el 18 de junio pasado, aunque su muerte ya se habría producido dos días antes, el 16 de junio.

El contador y actor estaba semidesnudo y en medio de un charco de sangre. Tenía varias heridas de puñal y signos de haber peleado contra alguien.

El ensañamiento del asesino hizo suponer a la Policía que se trató de un crimen por motivos personales, ya que la Policía recibió la información de que el ahora fallecido recibía habitualmente a hombres extraños en su casa.

Miguel Ángel Pereira Acosta fue encontrado en su habitación, que funciona en el patio del fondo de una propiedad en cuyo frente viven su hermana, Blanca, y un hijo de esta, identificado como Cristhian Alfredo Petersen Pereira, de 46 años.

Cristhian registra numerosos antecedentes por asalto e incluso alguna vez llegó a ser favorecido con el indulto presidencial.

Coincidentemente, fue Cristhian el que se presentó ante la Policía a hacer la denuncia de desaparición de su tío y después fue él mismo quien comunicó haber encontrado el cuerpo en la casa donde ambos vivían.

El comisario Grance dijo que el detenido Aldo Andrés González González contó que el que supuestamente le entregó el celular para que lo vendiera fue justamente el sobrino del fallecido, Cristhian Alfredo Petersen Pereira.

Según la información que dio Cristian Petersen, su tío era pareja del ahora detenido Aldo Andrés González.