La senadora Blanca Ovelar informó ayer durante la primera sesión del Senado que retiraba su candidatura a la presidencia de la Cámara Alta y que se abstenía de votar a los candidatos para la Mesa Directiva. En su alocución se mostró conciliadora con la bancada de Honor Colorado y el gobierno de Santiago Peña, pero lanzó numerosos reclamos.

Señaló que desde este organismo deberán priorizar los intereses del país y trabajar juntos en forma solidaria y respetuosa. Recalcó que la democracia requiere participación y compromiso por parte de la clase política y la población.

Sin embargo, recordó que la división de poderes, la independencia entre ellos, la recíproca cooperación y el mutuo control del ejercicio del poder son fundamentales para esta tarea.

Indicó que un sector considerable de senadores de la ANR y la multibancada opositora intentó presidir el Senado para expresar el pluralismo, que habría contribuido a la gran legitimidad ganada por el gobierno de Santiago Peña.

Sin embargo, reconoció que para ello hacían falta votos y el cartismo demostró más capacidad y persuasión sobre los parlamentarios y especialmente entre sus compañeros de bancada.

“Auguro un tiempo fecundo a pesar del monopolio del poder por un solo sector del partido, del partido que ganó las elecciones, y creo que aportando lo mejor de nosotros vamos a ser capaces de honrar esa enorme expectativa de la sociedad”, reclamó la senadora.

Subrayó que este Senado tiene la responsabilidad de reconciliar los conflictos existentes en la sociedad sin eliminar su pluralidad e ideas encontradas.

Así también, advirtió que obedecer “al único líder” es contrario a la democracia. “Que no se intente entender y reducir el funcionamiento de la democracia a un conjunto de procedimientos formales”, pidió.

También llamó a no sumergir la libertad individual y la diversidad que existe en la sociedad en una comunidad homogeneizada donde hay un solo líder. “Eso es contrario al espíritu de la democracia y al republicanismo”, manifestó.

Blanca Ovelar dijo durante su discurso, dirigiéndose al nuevo presidente del Senado y del Congreso, Silvio “Beto” Ovelar (ANR, HC), conocido también como Trato Apu’a, que no tiene ningún rencor personal contra él y que le apreciaba. Beto, a su turno, le dijo que el sentimiento de aprecio era recíproco.