El docente identificado como Óscar Daniel Villamayor Cáceres fue condenado a cuatro años de cárcel luego de que el fiscal a cargo, Silvio Alegre, demostrara su responsabilidad en un caso de estafa inmobiliaria ocurrido en Areguá en abril de 2017.

La víctima compró un terreno a través de un contrato privado con firmas certificadas, pero luego descubrió que el bien no pertenecía al vendedor, lo que le generó un perjuicio económico de más de G 51 millones.

El fiscal presentó evidencia documental y testimonios que confirmaron tanto la existencia del delito como la participación activa del docente. Según las investigaciones, el acusado se valió de su posición de confianza y del uso de documentación aparentemente válida para concretar la transacción fraudulenta.

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Además, se destacó que el condenado ya había sido denunciado anteriormente por hechos similares, lo que reforzó la posición de la Fiscalía durante el proceso.