Firme para resistir al “bombardeo” tricolor

El arranque de Nacional fue eléctrico, con avances permanentes y oportunidades clarísimas para anotar. A Ameliano lo sostuvo Miguel Martínez. No faltará el que diga que el arquero está para eso, pero sus intervenciones fueron magníficas, desde el primer minuto.

Lea más: Los jueces de la fecha 17 del Apertura

Testazo de Colmán abortado por el golero. Remate de Gustavo Caballero que dio en el codo Báez, bloqueando el tiro para el penal cobrado mediante el VAR.

Doble intervención de Martínez ante Juanfer Alfaro, primero en el remate desde los 12 pasos, luego en el rebote que generó un siguiente despeje para la atropellada de Gustavo que se llevó por delante el poste, pero no pudo marcar por la rápida intercepción de Ferreira Ñamandú.

El espectáculo estuvo parado por un par de minutos porque uno de los palos había tenido una pequeña inclinación.

En su primera carga, Ameliano llegó al gol que el rival no lo pudo concretar, pese a la insistencia. Un envío por derecha de Sarquis hacia el sector opuesto lo recepcionó Luis Ortiz, que tras salir de la frágil marcación de Juanlu Alfaro lo hizo pasar del largo a Ramírez con una pisadita para la posterior resolución del zurdo con “la de palo”, la pierna derecha.

Nacional no tuvo capacidad de recuperación. Lejos de estimular, sus hinchas empezaron a meter presión con los cuestionamientos a los “marcados”, cuando que en realidad el problema era el funcionamiento colectivo luego de la anotación, porque antes todo parecía estar bien.

Iniciada la complementaria, Tiago Caballero le sacó pintura al travesaño, el mismo que le salvó al elenco visitante en tiempo adicional tras un disparo de Juanlu.

Fue un “bombardeo” tricolor permanente. Un frentazo de Monteagudo fue desviado por Martínez. Ameliano hizo que el partido se haga más lento, quemando segundos.

Sobre el final fue expulsado Aranda por doble amonestación. También fue a vestuario antes de tiempo Tiago, por dos tarjetas amarillas, producto de la impotencia, porque de nada sirvió el esfuerzo.